Hay ciertos elementos en el diseño de relojes que se convierten en la firma de una marca. Trascienden los límites de la estética y se convierten en emblema de la identidad y el legado de la marca. En el caso de Chronoswiss, la Corona de cebolla es un rasgo característico (probablemente el más llamativo), un faro que ha definido constantemente la identidad de la marca durante 40 años.

Desde la fundación de Chronoswiss en 1983, la Corona de Cebolla ha sido un elemento distintivo de casi todos sus modelos. Más que un mero componente para dar cuerda a un reloj se erige como un símbolo, uno que declara rotundamente: Esto es Chronoswiss.



Un guiño a su legado

La corona en forma de cebolla se remonta a la época de los relojes de bolsillo, cuando se necesitaba una corona grande para dar cuerda al reloj sin quitarse los guantes. Su forma única, diseñada para ser funcional, se convirtió con el tiempo en un distintivo estético. Es un recordatorio visual y táctil de nuestras raíces en la relojería mecánica.

A través del tiempo y la marea

A lo largo de los años, Chronoswiss ha abrazado la innovación y ha superado continuamente los límites de la relojería. Desde el Flying Regulator hasta el Open Gear Resec, los relojes Chronoswiss se han hecho famosos por sus diseños innovadores y su tecnología de punta. Pero a través de todos estos cambios, la corona de cebolla ha permanecido constante, recordándonos nuestros comienzos y nuestro inquebrantable compromiso con la tradición.

Abriéndose paso a lo largo de nuestros 40 años de historia, proclamando sutilmente la identidad Chronoswiss en cada reloj. Por lo tanto, no se trata únicamente de un elemento de diseño, es una parte de nuestro ADN.



Mirando al futuro

Mientras seguimos evolucionando y reinventando nuestra colección, la Corona de cebolla permanecerá. Es nuestra promesa de continuar el legado que nos ha llevado hasta donde estamos hoy. Es una señal de que, independientemente de lo lejos que llevemos los límites de la innovación relojera, nuestras raíces siempre permanecerán ancladas en la tradición que es la esencia de Chronoswiss.

En cada nuevo modelo, al dar cuerda al reloj mediante la corona de cebolla, sentirá una conexión, no sólo con su reloj, sino con una herencia que abarca cuatro décadas. Una herencia que la Corona de cebolla seguirá simbolizando a medida que avancemos en nuestro empeño por combinar tradición e innovación en el mundo de la relojería.

La Corona de cebolla reúne el pasado, el presente y el futuro de Chronoswiss.